domingo, 17 de julio de 2016

CAPÍTULO 8. McLEOD GANJ - MANALI- SIMLA A LOS PIES DEL HIMALAYA


   El Norte de la India nos descubre un país diferente, las grandes ciudades congestionadas y contaminadas dejan paso a una India más despoblada, rural y natural. Las faldas de la cordillera del Himalaya nos dan un respiro y permiten coger aire antes de la etapa definitiva en Varanasi. 



   Tras una encadenación de autobuses y trenes, discurriendo por carreteras abruptas y llenas de curvas llegamos a McLeod Ganj es conocido como la pequeña Lhasa, es la sede del gobierno del Tibet en el exilio desde 1960, y acoge a una congregación enorme de monjes tibetanos con su líder,  el decimocuarto Dalai Lama a la cabeza. Dharamsala (la parte baja) y Mc Leod Ganj (la parte alta) es un lugar mágico, ubicado en plena montaña, lleno de paz, tranquilidad y misticismo, es un centro de cultura tibetana y del budismo, un lugar de meditación y escapada de la realidad del resto de país. 




   
   Esta zona ofrece paseos muy agradables, pequeñas rutas de montañas entre pinos y cedros del Himalaya que acaban en sorprendentes dhabas escondidas y con vistas increibles, en cascadas increibles o en valles adornados con cientos de banderas de oración. Existen gran cantidad de templos pero el principal sería el complejo Tsuglagkhang que reune todos los edificios importantes del movimiento tibetano. Es sobrecogedor escuchar las historias de los tibetanos que huyen del Tibet atravesando a cordillera del Himalaya en condiciones durísimas para llegar a Dharamsala.




   Mejor alojarse en Mcleod, caminar los 2 kms que separan este núcleo turístico y subir a la aldea vecina de Bhagsu, nos vamos a encontrar una amplia oferta de hostales a precios más competitivos. Además la vida turística no es menos atractiva, puedes realizar talleres de cocina, de yoga, de talla de joyas o madera... está bastante curioso y muy animado, con conciertillos y actividades culturales.

   Desde McLeod Ganj puedes coger un microbus privado (de escasa comodidad si lo que buscas es un precio barato) y plantarte a primeras horas de la mañana (con ello me estoy refiriendo a las 5am aprox) en otro de los destinos de montaña más apetecibles para los turistas. Manali (concretamente a zona recomendada es la parte de arriba: Old Manali) es otro pequeño reducto de paz, tranquilidad y parece ser que muchas drogas y atrapados místicos, casi todos israelies, que ha hecho de este núcleo urbano su peculiar aldea de irreductibles galos.


   Manali es la puerta de entrada al Himalaya, lugar de retiro mochilero por excelencia. Se dice que se ubica en el lugar donde el arca de Noé hindú se quedó encallada tras el diluvio universal (que cosas, oye, había dos arcas) Aparte de concentrar gran cantidad de restaurantes y tiendas de artesanía que ofrecen mil cursos y actividades de montaña y naturaleza, Manali nos ofrece muchas excursiones buscando templos como el de Dunghri monasterios, lugares sagrados o cascadas impresionantes, incluso nos encontramos un pequeño grupillo de casas de madera, donde parece que el tiempo se ha detenido por completo, es alucinante, el espectáculo de ver dar clase en la escuela, ver a los habitantes de Old Manali vivir de la ganadería, de la agricultura, tejer sus mantas a la puerta de las casas, jugar al volley que parece ser el deporte más popular entre jóvenes y mayores....todo en una quietud superagradable que hace ese destino uno de los más disfrutados del viaje, aunque para mucha gente Manali sea el destino definitivo y toda su rutina se limite a fumar porros en un lugar donde hasta la maría crece libremente en los márgenes de los caminos.




   Desde Manali puedes apuntarte para realizar trekkings de mayor o menos dificultad, aquilar una mítica motocicleta Royal Enfield o esperar para copar un 4x4 y pasar en un megatrayecto entre seismiles a través del valle de Kullu o dirección a Leh o Ladakh. Posibilidades, todas las que puedas plantearte, y todas impresionantes.




   Finalizamos este intervalo del viaje por el norte en Shimla, que durante muchos años fue el lugar de recogimiento y vacaciones de verano de las clases altas británicas durante su dominio en la India. 


   Nuestra pena fue llegar con un tiempo desastroso, de cielos encapotados y cubiertos que nos impidieron de primeras ver dónde nos estábamos metiendo. sabíamos que estábamos en mitad de la montaña, que los paisajes deberían ser preciosos...pero durante el primer día nada de nada. 



   Shimla es una población edificada por niveles, el autobús te dejará en el de más abajo, necesitarás un taxi para llegar hasta el ascensor que te deje a su vez en el nivel de alojamientos...tiene su encanto porque esto elimina completamente los medios de transporte, no hay tuc tuc, no hay ruidos, no hay tráfico imposible...The Mall es la calle de comercios y turismo, desde Shimla hgay un par de pateadas curiosas, una para visitar el templo de Hanuman, el dios mono, otra de ellas a una pradera, a unos 5 kms donde se jugaba al polo y al criquet, deportes muy populares en la India.



   Salir de Shimla y conectarla con Varanasi se convierte en un dolor de cabeza increíble. Durante todo el viaje nos hemos dejado llevar por la gran cantidad de ofertas que había para alojarnos, para ayudarnos o la facilidad para encontrar billetes a los destinos deseados. En este momento concreto del viaje, todas las facilidades parece que de repente desaparecen, trenes llenos, ninguna combinación posible bus-tren. Al final, tras muchísimas negociaciones y combinaciones, acabamos fiándonos de una agencia (pese a los recelos iniciales) a hacer uso de este recurso, resulta que por un poquillo más, nos solucionan la papeleta de dejarnos en Varanasi en un trayecto que se convertirá en odisea a través de la montaña, para en unas escasas "13 horas" a la desquiciante velocidad de 5kms/h dejarnos en Delhi, hacer noche, ser timados nuevamente por el hostal y poder pillar un tren que nos deje en otra montonera de horas en Varanasi nuestro último destino del viaje.

sábado, 9 de julio de 2016

DESCUBRIENDO INDIA. CAPÍTULO 7. AMRISTAR TERRITORIO SIJ



¿TERRITORIO SITH? NOOOOOOOOOOOOO...SIIIIIIIIIIIIIIIIJ


   En nuestro camino al norte de la India, una de las paradas marcadas en rojo era Amristar. Concretamente lo que nos llamaba la atención era su templo de Oro, pues, yo personamente no lo conocía y resulta que es el monumento indio que más visitantes atrae, sorprendentemente más que el Taj Mahal ya que es el epicentro de toda la cultura que rodea al Sijismo y lugar donde han acontecido dos de las masacres religiosas más sangrientas del país.



   El trayecto va a ser largo y doloroso, tren hasta Patankhot luego un bus....horrible la verdad, autobuses atestados de gente, trayecto nocturno...todo un ejercicio de supervivencia y paciencia. Muchas muchas horas, ya no sé cuantas...pero merece la pena.

   Amristar es una de las ciudades de estado de Punjab, cercano a la frontera pakistaní (con todo el riesgo que eso supone) es uno de los puntos claves para entender la India, pues es el lugar donde vamos a encontrar uno de los focos religiosos más importantes, el sijismo. el lugar de peregrinación y devoción es el templo dorado.


   El templo dorado es un edificio sorprendente, por su belleza como por todo lo que le rodea. Está abierto a todas las personas de cualquier nacionalidad, raza o religión, únicamente hay que mantener ciertas normas de decoro: cubrirse la cabeza, lavarse los pies, entrar descalzo, ser respetuoso etc.. todo dentro de la lógica. está en un pequeño lago y sí, es completamente dorado y emana una magia y una mística impresionante. Llegas primero a una plaza, a la entrada, llena de gente que se agolpa para dormir o rezar. Entras y descubres un reciento precioso, en torno a un lago en cuyo centro está el templo. la gente reza, duerme , canta, toca instrumentos de música....los Sij son personas superamables, de verdad que todo un grato descubrimiento.


   Un sij es algo digno de ver...turbante, casaca, espada o puñal cruzado en la cintura ¿espada o puñal? literal, van con su daga su espada o incluso creo recordar que vi pequeñas hachas.... Un sij debe llevar siempre las cinco k: El kesh o pelo largo sin cortar enrroscado y cubierto por un turbante de diferentes colores; el Khanga, un pequeño peine de madera para peinar tal cantidad de pelo; Kara, un brazalete metálico; Kashera, ropa interior de algodón y el kirpán o daga, que llevan como arma defensiva, nunca puede ser usada para atacar, ya que os sijs deben llevar una vida productiva, honesta y pacífica alejados de todo sentimiento de ira, lujuria, odio, egoísmo y codicia.


   En el templo dorado ofrecen dormir gratuitamente (o en habitaciones de pago privadas) y comida para todos los visitantes a cambio de un poco de trabajo voluntario lavando los platos, los cuencos etc... toda una muestra de paz y desinterés. pero es curioso, pues los conflictos armados entre religiones han afectado a este templo, y en él han acontecido dos de los episodios más trágicos de la historia india:


1. La masacre de Amritsar, fue una matanza ocurrida en 1919, las tropas británicas mandadas ametrallaron a una multitud de miles de hombres, mujeres y niños sijes, hinduistas y musulmanes desarmados que celebraban un festival de año nuevo. Este acontecimiento fue e preludio del movimiento de protesta de Gandhi años después.

2. En 1984 la primera ministra Indira Gandhi ordenó la operación Bluestar para arrestar a un lider sij independentista y destruir sus fuerzas. El ejército asaltó el interior del Templo Dorado. Un recuento oficial declaró que murieron 83 soldados y 492 civiles.  Muchos sijes consideraron el ataque como una profanación a su sitio más sagrado y su venganza se consumó cuando Indira Gandhi fue asesinada por dos de sus guardaespaldas (ambos sijes)  finales de año.

   ¿Por qué cuento todo esto? A mí me parece super interesante conocer todo esto, es parte del viaje: disfrutar de las ciudades, interaccionar con la gente, empaparte de su cultura, su gastronomía y conocer parte de su historia para comprender su situación presente. 

   Muy relacionado con este último párrafo, está la siguiente visita que puedes y debes realizar estando en Amristar: Acudir a la ceremonia de cierre de fronteras entre India y Pakistán que se celebra en Wagah, a 30 kms de Amristar. ¿Cómo puedo ir? te va a resultar muy fácil, si te paseas por las inmediaciones del templo de oro te lo van a ofrecer continuamente, muchos conductores o taxistas improvisados que llenan una furgonetilla y te llevan y te traen. Te tienes que fiar y darles una pequeña fianza, también regatearles porque se querrán subir a la parra de primeras..ya no recuerdo si fueron 1200 rupias por los tres. 

   La ceremonia es algo loco, un show de exhibiciones y parafernalia completamente impensable si tenemos en cuenta la situación de tensión armada entre ambos países (resumo brevemente para meternos en contexto: tras el abandono de Reino Unido de la India, dividen a su criterio la India y crean Pakistán como un país para los musulmanes...bueno la división se convierte en algo caótico y que genera múltiples focos de violencia pues no se tienen en cuenta fronteras, pueblos, regiones....se hace sin conocimiento. además Hindúes y musulmanes quedan enfrentados, principalmente por el control de la región de Kachemira (se abordaba esta conflicto en la película que mencioné en el post anterior) este conflicto aún existe y es una situación tensa que ocasiona una guerra permanente entre ambos países) 


   Pues bien, llegas a la frontera, pasas múltiples puntos de control, cacheo y revisión de todo lo que llevas y te meten en una especie de estadio, dividido en dos mitades, zona pakistaní y zona hindú...pues comienzan los cánticos, los bailes (las niñas se bajan se agrupan y se ponen a perrear al estilo bolliwood la gente las jalea y aquello se convierte en un cocoloco hindú....sin escotes ni shorts ni nada...alli en sari hasta para hacer cemento), las banderas de ambos países ondeando....y las muestras de exaltación nacional dirigidas por los speakers de cada país...ES QUE TIENEN HASTA SPEAKERS, ES UNA LOCURA..... A la hora de cerrar la frontera se inicia una serie de desfiles y carreras, los soldados se dirigen al otro lado haciendo el paso del pato y luciendo espectaculares uniformes, se retan, se miden, se provocan a voces y a gestos a cada cual más...ridículo? una cosa digna de ver la verdad. En youtube hay muchos videos como este....ver para creer vamos. https://www.youtube.com/watch?v=aspXyKIKP6w

   Esa noche la pasamos en el templo dorado, fuera, en la plaza, rodeados de misioneros, mendigos y turistas (me contó un paisano que muchos de ellos no tienen donde estar y simplemente se quedan alli, tumbados entre decenas de perros con los que tienes que tener mi ojos y el resto depersonas)....una experiencia más que vivir, nada del otro mundo tampoco porque la vivimos fuera del templo, quizá lo bonito hubiera estado dentro, pero no supimos dar con las habitaciones y teníamos el hándicap del equipaje. Sin embargo, algo bonito y un sitio muy recomendable para visitar.


viernes, 8 de julio de 2016

DESCUBRIENDO INDIA. CAPÍTULO 6 (RAJASTHAN 2.0)



JODHPUR- PUSKHAR- JAIPUR- AGRA- DELHI


   Me dejo acumular el trabajo y se me van a juntar viajes. El grado de saturación de trabajo y desconexión en que me he visto sumergido estos últimos meses de curso ha hecho que dejase abandonado este proyecto. Habrá ahora que retomar a la carrera las idas y venidas por el inmenso país indio para dejar hueco al siguiente proyecto que se nos viene en tres semanas "Voluntariado en Cuba".


   Habíamos dejado el asunto en la bella ciudad amurallada de Jaisalmer... Pues bien, salimos de la desértica comarca cercana al desierto de Thar para seguir recorriendo las principales ciudades que nos ofrece el Rajasthan. Nuestro primer destino, aparece en las guías como "la ciudad azul" y se trata de Jodhpur, 6h 45m de recorrido.  

   Se conoce bajo este sobrenombre porque el azul es el color predominante de las casas desde el fuerte de Mehrangarh, en lo alto de una colina. ¿Por qué allí se grabó la segunda parte de los pitufos y pintaron las fachadas como en Júzcar? No, estas casas azules en principio eran las casas de los brahmanes, la casta más alta de la sociedad, sin embargo el resto de castas han optado después por este color y ahora se pintan ya por motivos turísticos. Sin embargo, la ciudad azul, únicamente es azul desde lo alto, si nos metemos a recorrer sus atestadas y estrechas callejuelas, lo predominante vuelve a ser la acumulación de  basura, olores, tráfico y ruido.




   Jodhpur ha sido un enclave importante del imperio mogol y un nudo de caminos en las grandes rutas de comercio indio, lo que permitió que floreciese una ciudad prospera que conserva gran cantidad de restos de esa riqueza: el fuerte de Mehrangarh, los bazares de la ciudad vieja, la torre del reloj, Mandore Gardens etc...

   Creo recordar que el hostal donde nos alojamos era el Bob Hostel (Near to khunj Bihari Temple) Katla Bazar, 342001 Jodhpur, India, bastante barato, nada del otro mundo, pero bien ubicado y con una terraza curiosa. Está cercano a un templo por lo que se escuchan los cantos y oraciones, aunque al anochecer hay una gran cantidad de mosquitos, que convierten el ratillo en la terraza en algo no muy relajante.

   Una de la cosillas que se puede hacer en Jodhpur, (es más recomendable en Jaipur pero nosotros lo hicimos aquí) es ir al cine a ver una película de Bolliwood, es toda una experiencia, no te enteras mucho de los diálogos porque son en hindi, pero la cosa está curiosa. Nosotros vimos "Bajrangi Bhaijaan" y la historia es entretenidísima y preciosa. (que no, que no es coña, que a mí me gustó muchísimo aunque no entendía nada del hindi, pero la historia se comprende y es de llorar y todo)


   Próximo destino....Púskhar. De Jodhpur hay que tomar un tren hasta Ajmer, y de Ajmer, un autobús (petado de gente) hasta la población de Púskhar, enclavada a orillas de un lago y una ciudad especial pues es uno de los cinco lugares sagrados de peregrinación hindú. 

   Puskhar es una de las ciudades más tranquilas que nos hemos podido encontrar, se respira más paz que en ninguna otra de las grandes ciudades vistas hasta ahora. El centro de la vida es el lago, alrededor del cual se sitúan los ghats de oración. Al atardecer la situación es de una tranquilidad mística, pequeños grupillos de músicos tocando e invitando a tocar sus instrumentos, ancianos meditando y esperando cruzarse con alguien con el que compartir un tiempo y narrarle sus cosillas. (Algunos son unos jetas que solo buscan que una propina, pero recomiendo a veces dejarse llevar e iniciar la conversación pues aparte de que suelen ser muy amables, cuentan una historia que desconocemos completamente y nos sumerge de pleno en su cultura y sus creencias)


   Púskhar ofrece decenas de templos, quizá el más famosos sea el de Brahma (solo hay cuatro en todo el mundo), pero hay también  un par de templos situados en os alto de dos colinas que pueden ser una de de las excursiones entretenidas para hacer uno de los días. Están arriba, muy arriba, son muchas las escaleras que hay que subir y muchos los monos con os que tener cuidado, pero merece a pena las vistas. 

   Puskhar es también famoso por su famosa feria del camello "Pushkar Camel Fair", que se celebra durante la luna llena de noviembre y que coge a miles de visitantes y curiosos.

   Uno de los alojamientos más famosillos en Puskhar es el Hotel Everest Kalo ka Mohalla, Badi Basti, 305022 Pushkar, India, bastante barato y una de las sugerencias de la Loney planet.

   No nos quedamos quietos, hay que seguir moviéndose, Púskhar además, nos ha dado un breve respiro en este trasiego de megaciudades colapsadas y estresantes. Próximo destino: Jaipur, sólo unas 2h 30m de tren.

   Llegamos a Jaipur, la ciudad rosa y capital de estado de Rajasthán. El color rosa predomina en las fachadas de sus casas y simboliza la hospitalidad de esta ciudad. El caos de esta ciudad es solo comparable a lo vivido en Delhi. Nuestra primera decisión es visitar por nuestra cuenta los barrios artesanos, el meollo de la ciudad vamos, el Jaipur a pie de calle...y a sensación a cabo de unas horas es de autentica locura y colapso...los olores los ruidos, la masificación de personas, el tráfico... completamente bloqueados. 

   
   Si en Jaipur, optas por una visita turística, contratar un tuc tuc que te lleve durante todo el día por unas 800 rupias, a los principales monumentos puede ser una buena decisión aunque te vas a perder la realidad de la ciudad, pues únicamente vas a tener una visión amable y colorista llena de monumentos, lugares interesantes y curiosos. La vista al fuerte de Amber (si tienes el dinero para permitirte subir en elefante, pues en elefante...si no en tuc tuc) es indispensable, otra edificación mogol majestuosa que preside la ciudad. Otras visitas recomendables, el Hawal Mahal o palacio de los vientos, el observatorio de Jai Singh, maharajá aficionado a la astronomía...y completamente recomendada pero menos conocida, una de las visitas que más me llamaron la atención, Monkey´s temple...el templo de los monos...una increíble edificación compuesta por varios templos y estanques enclavados en la montaña. Nuestra visita coincidió con el anochecer y las sensaciones son tremendas, pero eso sí, hay centenares de monos por todas partes...hay que tener cuidado pues son bastante agresivos los cabrones.

Fuerte de Amber



Hawal Majal
   Finamente, la última parada de esta caótica semana  era obligada, por la presencia en Agra del monumento más famoso en la India: El Taj Mahal. La visita a Agra, mi opinión es que con reducirla al Tah Mahal, basta sobra y te quita de muchos dolores de cabeza, Agra vuelve a ser otra ciudad caótica y desesperante hasta extremos insospechados. Pillamos un hostal para no sumar muchas prisas y viajes, llegar, comer, ver el Tah Mahal, cenar y descansar para madrugar el día siguiente y escapar a destinos más tranquilos.

   La entrada al Taj Mahal son unas 750 rupias para el turista, (15 euros aprox) y unas 20 rupias para el visitante indio ¿Por qué? Porque a diferencia de ellos, tú tienes dinero, asique te lo tienes que gastar y punto...la lógica es aplastante y tampoco vamos a discutirlo ahora, la realidad en la que viven es muy diferente a la nuestra, asique en parte lo veo lógico, se paga y punto. 

   El nivel de seguridad dentro del recinto es enorme, tienen controlada toda posibilidad de atentado terrorista, doy fe de que la mera presencia de una bandera de un pequeño pueblecillo de Salamanca hizo que se desencadenase la respuesta inmediata de dos militares...se te quitan las ganas y te meten el miedo en el cuerpo. existen unas consignas que por unas 20 rupias te dejan guardar todo aquello que creas que puede suponer un problema dentro...No es que te den una sensación de fiabilidad enorme, pero, es lo que hay.

   La visita merece la pena, a pesar de que la elevada contaminación atmosférica a la que se ve sometido este edificio de blancas paredes de mármol está haciendo peligrar su estado de conservación, es una maravilla...de hecho, una de las siete maravillas del mundo moderno. Luego por dentro, lo que es el edificio en sí, la tumba, es más bien sobria y sencilla

La que ves antes de llegar a la India
La que nadie te va a mostrar
La que te encuentras

Y al final la que consigues
   Eso sí, no esperes conseguir fácilmente esa foto mítica con el Taj Mahal de fondo, la gente se agolpa se pega se empuja, incluso hay fotógrafos contratados por los turistas que se creen los dueños de los mejores emplazamientos, una autentica aventura para una bendita foto. Uno de los trucos para conseguir una buena fotografía del edificio, en contraste con un amanecer o una atardecer es buscar los rincones del otro lado del río Yamuna, algunos en el interior de un parque  (Mehtab Bagh) que hay que pagar, otros en la orilla del rio, ya gratuitos...todos los conductores de tuc tuc conocen estos lugares de sobra.

   Agra tiene dos o tres cosillas más, quizá el mismo tuc tuc que has contratado para llevarte hasta el Taj Mahal (cuidado con los despistes porque existe un anillo de calles que rodean el monumento donde solo pueden entrar vehículos eléctricos y rickshaws, nada de vehículos a motor como los tuc tuc, esto puede hacer que tu conductor e deje y te recoja a una cierta distancia de la puerta de entrada) puede darte una visitilla rápida por el fuerte rojo de Agra o un pequeño monumento de formas familiares al Tah Mahal (Baby Taj) que reamente es una tumba de un gobernante de la ciudad.

   Saturados del caos y el desgaste psicológico al que nos vemos sometidos en esta zona completamente turística de la India, y temiendo o que nos iba a venir en Varanasi al final del viaje...decidimos cruzar al norte del país y dedicar otras dos semanillas a recorrer la zona montañosa en las faldas del Himalaya...

McLeod Ganj....Allá vamoooooooos.....